Genevieve Cohn nació y creció en el estado de Vermont en EE.UU donde se licenció en Pintura en la Universidad de Indiana (Bloomington) y obtuvo su Grado en Bellas Artes y Cultura por el Ithaca College.
Desde entonces ha exhibido sus obras tanto dentro como fuera de los EEUU, ejemplo de ello fueron sus exposiciones en el Painting Center de Nueva York, en el Studio OH! de Chicago así como en la Grunwald Gallery en Bloomington. Su trabajo ha sido objeto de artículos en publicaciones tales como Art Maze Magazine, Friend of the Artist y Women’s Thing Magazine. También ha desarrollado actividad docente en la Universidad Northwest de Chicago durante el curso pasado y actualmente está produciendo en el programa en residencias artísticas de Airgentum.
La pintura de Genevieve Cohn camina entre el mundo real y un mundo transformado por las percepciones emocionales. Usando la imaginería e ideología de la Woman’s Land Army en las dos grandes guerras así como de las comunidades separatistas de mujeres, la artista crea comunidades construidas que existen en una época indeterminado en estado de colapso, no es pasado ni tampoco futuro, quizá ambos. También dibuja Genevieve desde inspirándose en la literatura infantil en un juego imaginativo para compensar la seriedad histórica de los grupos separatistas femeninos. Esta combinación de seriedad histórica e inocencia da a sus escenas una complicada y a veces incómoda sensación de identidad.
El proceso creativo de esta artista refleja los ritmos de su propia vida: libre, caótica, reactiva e intensa. Cambia entre capas transparentes de acrílico y gruesas capas de pintura aplicadas con paleta a cuchilla, permitiendo que la superficie del lienzo sea a un tiempo estructurada y poéticamente atmosférica. Tal como nosotros mismos nos percibimos diferentes con el paso del tiempo, Genevieve construy superficies para pulisrlas despus y revelar historias preexistentes. En sus propias palabras:
“Mientras intento señalar la liminalidad del espacio en que la realidad perceptual y la esfera de la imaginación convergen, la mujer de mis pinturas ata al espectador a la esfera de lo real. Las extrañas escenas representadas en mis cuadros son sostenidas por mujeres que navegan y aúnan el paisaje que las rodea; ellas unen sus mundos con cuerdas y moldean montañas con sus manos desnudas. A veces sus tareas resultan inciertas, ambiguas, incluso futiles, pero estas mujeres anclan al espectador a un mundo que está forjado por la incertidumbre. Hablo desde un espacio de vulnerabilidad con figuras que intentan conectarse a la tierra en un mundo efímero”